MI VISIÓN DE EUROVISION

Columna de opinión basada en la pasión que siento por el concurso, aderezada con unas gotitas de ironía, una pizca de acidez y puñados de diversión, que se actualizará diariamente abordando desde los temas de más rabiosa actualidad en el micromundo del Certamen Europeo, hasta los momentos inolvidables de la historia del Festival de la Canción.

27 octubre 2013

FRANCIA 1968


Queridos eurolectores,

En primer lugar y antes de comenzar con la canción del día de hoy, quiero comentaros unas cuantas cosas...

Entre ayer y hoy se ha confirmado que el escenario de Eurovision 2014 lo diseñará Claus Zier por orden expresa de la DR. Sabemos que estará basado en la idea de los astilleros y en concepto del Eurovision Island que van a montar los daneses. De ahí que el escenario se vaya a situar en el centro del espacio escénico. Pero por ahora no existe mucha más información, así que haré un análisis detallado en una entrada del blog cuando se pueda opinar con claridad.

Por otro lado, llevo unos días sin actualizar porque le he estado dando vueltas a una idea que me tenía confuso a la hora de publicar en el blog.

Hasta hoy había publicado mis canciones favoritas de Eurovision, las 100 más especiales en concreto. Hasta ahí todo perfecto... El problema aparece cuando observas que esa lista, que en sus primeros puestos se mantiene firme sin duda, según se va descendiendo es más difícil e injusto ordenarla. Así que como conclusión he tomado la decisión de seguir publicando canciones maravillosas, sin ponerles un número que las ordene.

De hecho la canción de hoy no estaba en el listado inicial aunque si cerca a punto de entrar en el él. La representación francesa de 1968 es una obra titulada La source (La Fuente en castellano) e interpretada por la ganadora del festival en 1962, Isabelle Aubret.

Ya os hablé en la último entrada de la canción que le dio a Francia su séptimo bronce (Humanahum), hoy os traigo la que les entregó el cuarto preciado metal en su historia de participaciones. Comencemos con la especial historia de este tema...

La popular cantante francesa Isabelle Aubret, que en realidad se llama Thèrése Coquerelle. Después de ganar el 18 de marzo de 1962 en Luxemburgo la VII edición del Grand Prix de la Chanson d'Eurovision  con Un premier amour; y de tener todo el éxito que se puede conseguir, siendo una de las estrellas más importante de panorama musical francés en los 60's.

En 1964 y con tan sólo 26 años de edad, cuando estaba a punto de firmar como protagonista en el filme "Los paraguas de Cherburgo", sufre un terrible accidente de coche que le hace parar su carrera un someterse a 14 operaciones.

Derivado de ello, y como anécdota, el importante Jacques Brel que todos conoceréis por cantar Ne me quitte pas, le cede los derechos de autoría de por vida del tema La fanette, para que pueda vivir de las rentas debido a su estado. Pero ella es una luchadora nata y sale adelante de ese duro trance, volviendo a los escenarios 4 años después; en 1968...  


En 1968 terminado el proceso de recuperación del dramático suceso que le hizo parar su vida de repente, se atreve a volver al Festival de Eurovision y reaparecer por la puerta grande siendo seleccionada de forma interna por la RTF.

Para su vuelta a los escenarios y competir en el Royal Albert Hall de Londres el 6 de abril contra el popular Cliff Richards y la joven desconocida Massiel, elige una dulce balada francesa de corte clásico y aires de nana y trova medieval.

La source, con música compuesta por Daniel Faure, y letra de Henri Dijan y el eurovisivo Guy Bonet (ESC's 1970 y 1983), es un tema que parece infantil, simple y lineal; pero en realidad es mucho más que eso... es poesía en estado puro. Inspirado en un trágico y sádico suceso que sacudió la prensa francesa un tiempo antes, los autores de la letra se inspiraron en él para escribir el tema y maquillarlo como si fuera una leyenda de modo que pasara la censura del momento.

La historia cuenta la violación de una menor que vive en el campo y todos los días va a por agua a una fuente, hasta que un día salen 3 malnacidos a su encuentro y abusan de ella hasta asesinarla. Duro pero real, y desgraciadamente no tan alejado de las noticias que vemos cada día en los sucesos...

Parece increíble que la frágil y sensible Isabelle Aubret se atreviera con un tema tan delicado en todos los sentidos, pero claro, los espectadores de la época no conocían el idioma y lo que decía, exceptuando los países francófonos, claro está.  


La interpretación en el escenario presidido por el logo clásico de la red de Eurovision en forja dorada, le valió el 3º puesto con 20 puntos.

Con un rictus labial similar al de nuestra Mari Trini. Vestida en gasa azul con mangas abombadas, de largo hasta los pies, y con un pequeño recogido. Pensado todo el conjunto para transmitir sencillez, ignorancia y un aire naif al asunto; Isabelle se desenvolvió esos 3 minutos de forma magistral, mucho más expresiva que en 1962, y dominando la escena como una de las más grandes que han pasado por el ESC.

Posteriormente en 1976 y 1983 volvería a participar en las preselecciones de sendos años para intentarlo una tercera vez, quedando en muy mala posición en el primer año citado, y quedando en tercer lugar en la del segundo.

Eurobesos para todos y os espero en breve con un tema alemán que nos habla del mundo en el que vivimos ;)

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