Buenas y sabáticas tardes eurolectores,
Antes de hablaros de la bonita canción que representó al país más neutral de Europa en 1996, he de anunciaros que esta noche se celebrará una Fiesta de Eurovision en el pub Medaigual de Chueca, en Madrid, que comenzará a partir de las 23:30 horas y durará hasta las 4 de la madrugada. Os animo a que vengáis a bailar los grandes éxitos de Eurovision con nosotros ;)
Y ahora sí, me dispongo a hablaros de esta maltratada canción, que es un dulce himno al amor, la cual pasó desapercibida el 18 de mayo en el Spektrum de Oslo.
Aunque no corrió la misma suerte en el proceso de selección previo fechado en los días 20 y 21 de marzo, en donde los 30 jurados de los 30 países interesados en concursar en Eurovision 96 tuvieron que valorar las 29 canciones aspirantes a llegar a la cita de mayo. Fueron 29 ya que el tema de Noruega estaba clasificado directamente para la final por ser el país anfitrión. Así que 7 de esos 29 quedaron eliminados, clasificándose 22 que unidos a la canción del país celebrante compondrían el listado de 23 televisiones candidatas a ganar la 41ª edición del ESC.
En esa preselección basada en cintas de casette y despachos de los entes públicos televisivos, Suiza quedó en una merecida 8ª posición con 67 puntos (¡Qué menos!). Mientras que en el único scoreboard virtual de la historia sacó 22 puntos actuando en la novena plaza, lo que la dejó decimosexta. Así que o la mayoría de los países que votaron al tema quedaron eliminados en el corte previo o "mí no comprender nada"... :((( Pero junto a Suecia y Noruega me parece de lo mejor de dicha añada.
Kathy Leander de nombre artístico, siendo su nombre real Katrin Meyer, nació en el cantón suizo de Jura y desde temprana edad comenzó a cantar, y aunque participó en festivales country en 1991 y 1992, en 1996 en el momento en el que fue designada para ir al concurso trabaja en la banca de Ginebra, que esas labores se les dan muy bien a los del país alpino y a los ladrones que llevan allí sus botines ;)
Con una sencilla balada arreglada en piano fundamentalmente y con cuidada percusión a partir de la segunda estrofa, la treintañera Kathy se subió al mecano de Oslo, el indescifrable escenario con aires de plataforma petrolífera para cantar con armonía y suavidad.
Vestida de blanco roto y con media melena recortada con respecto al videoclip, la NRK le hizo muchos primeros planos jugando con el marco desenfocado, ya que una de las novedades del año residía en hacer efectos de imagen a cada representación.
Tras participar, fracasar, y tener problemas con su compositor y productor, Régis Mounir, volvió a la banca hasta 2001, cuando comenzó su labor como corista del artista Stef de Genf. En 2003 participó en un talent show y en 2006 sacó a la venta su primer disco.
Llevamos 3 canciones seguidas: Turquía 1999, Noruega 1993 y Suiza 1996 que no tienen mucha historia que contar ya que pasaron desapercibidas en sus respectivos años y las carreras artísticas de las intérpretes fueron breves y sin trascendencia, lo que hace difícil el daros información. Pero sí quiero extraer una moraleja de ello, y es que no es necesario ser un artista de extensa trayectoria para conquistar el corazón de un eurofan, sino que con 3 minutos mágicos que te hagan sentir conseguirán que guardes en tu retina, tu corazón y el baúl de tus recuerdos esa canción para siempre.
Muchos eurobesos para todos y mañana una canción con nombre de rusa: Anouschka ;) ¡Que es uno de los temazos de los 60's!
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