Buenas noches del lunes queridos eurolectores,
En cinco días a estas horas, o lo que es lo mismo, 120 horas estaremos desquiciaditos perdidos con la gala de elección de la representación española para Copenhague. Me pregunto si resistiremos y seremos fuertes (Hold on, be strong) para aguantar este calvario de dramas y lágrimas que culminará en la madrugada del domingo con problemas, acusaciones y quejas sea el resultado que sea.
Pero bueno, yo a lo mio que es la historia, que ya tendré tiempo de ponerme al día en esto otro con mi columna de ogae para el jueves... Así que la entrada que nos ocupa hoy fue la apuesta más elegante y moderna de la edición de 2008, año en que Amy Winehouse triunfaba con Back to black y Duffy con Merci, por citar dos ejemplos de melodías de aires sesenteros con revival de guateque pero arreglados y producidos con sonidos del momento actual en el que se encontraban. Y aún hoy en día, tras seis años sigue funcionando este tipo de música que combina esos dos estilos marcados y diferenciados.
Maria Haukaas Storeng había participado un tiempo antes en un talent show que no llegó a ganar pero que le dio la popularidad suficiente para ser una de las caras más sonadas de MGP noruego. Aunque llevaba muchos años haciendo papeles en el teatro musical, no fue hasta ese momento cuando alcanzó la gloria en su país natal.
Nació en 1979 y con 27 años se lanzo a la conquista de la preselección noruega con el tema citado anteriormente, Hold on , be strong. La composición era obra de Mira Craig, la cual también era cantante y probó suerte en el Melodi Grand Prix 2010.
Tras ganar la segunda semifinal de las tres que se realizaban, llegó al Specktrum de Oslo, sede de Eurovision 1996, para ganarse el pasaporte a la capital serbia, Belgrado. Y por supuesto que lo consiguió cerrando la ronda de actuaciones concursando en octavo y último lugar; puesto que debe de tenerle concedido el destino porque también le toco para su segunda semifinal de la gala previa en la fase de clasificación y para la final de Eurovision.
Finalizó con un record de llamadas que era impropio de los noruegos, con un total de 195.661, si bien esto esta un aperitivo al lado de la cifra meteórica que tuvo al año siguiente Alexander Rybak, el niño de los records, con sus 747.888 impactos en el televoto.
La Haukaas, como familiarmente la llamo yo y creo que una gran mayoría de nosotros, le sacó alrededor de 77.000 votos de diferencia a Torstein Sødal con su himno nórdico Eastern wind acompañado de antorchas con fuego.
En las casas de apuestas nunca llegó a cuajar la cualidad de favorita que yo la veía desde que ganó la preselección, y siempre se mantuvo en la mitad del listado sin destacar en demasía.
Otro cantar fue la rivalidad que se creó en el mundo eurofan con esta candidatura y la de la Polonia, que iba de la mano de la norteamericana Isis Gee (la caballona como se la conocía y se le conoce ahora también). La guerra se derivó de que actuaban seguidas en la primera semifinal del martes 20 de mayo, en octava plaza la noruega y en novena la americana. Se comentaba por parte de los defensores de cada una de las participantes, que la una iba a eclipsar a la otra y que se iba a quedar en la semifinal. Al final pasaron las dos a la gran final, pero mientras que Maria Haukaas lo hizo en cuarto lugar con 106 votos frente a los 42 de la de Polonia que pasó décima por los pelos.
En la gran final le toco actuar en el puesto 25 tras la canción que analizamos en el blog ayer, la ganadora Rusia que lo hizo en vigésimo cuarto lugar. Y es que curiosamente las canciones que finalizaron 3ª, 6ª, 1ª y 5ª actuaron en los huecos 21, 23, 24 y 25, siendo el vomitable Chiki-Chiki el que lo hizo en el 22.
Recibió mucho apoyo la noche del 24 de mayo, y quedó en quinta posición con 182 puntos superando a la anfitriona Serbia con 160. Delante de Noruega se colocaron obviamente las que habían sido Top 3 su semifinal, es decir, Grecia, Rusia y Armenia y la ganadora de la semifinal 2, Ucrania. Lo que demuestra que el top de la gala del martes se comió con patatas al de la semi del jueves y a los finalistas, con que este año no era difícil con un Big 4 horripilante.
La Haukaas se puso más rubia de cara al festival y se quitó el castaño de la preselección, dándose con ello un aire más nórdico de cara a Europa y un look más latino frente a su país. También cambió el vestido, pasando de un malva oscuro a un azul añil en raso, pero ambos de corte similar; aunque lo que en realidad se notó del cambio fueron los kilos que perdió de cara al certamen.
Para la puesta en escena en la escenografía multimedia más bonita de todo el año, en un principio y para el primer ensayo se ideó que las tres coristas vestidas en colores similares a la cantante se colocaran a su lado derecho mientras que los coros masculinos se posicionaran a la izquierda acompañados de guitarras. De cara a la segunda prueba individual se mantuvo todo excepto las guitarras que no pegaban ni con cola y sobraban, lo que terminó de redondear el conjunto.
Me hace gracia que le plantaran tres bigardas enormes a la pobre Maria, que no es especialmente alta, más aún cuando le acompañan en la parte final de la canción pegaditas a ella. Pero tiene su encanto también el detalle. Como el movimiento de melena con pasos hacia atrás que se marcó en la segunda estrofa, emulando a Rocío Jurado, es mi momento favorito de la actuación.
Para terminar de cerrar la entrada quiero contaros que de los 182 puntos que recopiló, 24 fueron de dos 12's de Finlandia y Suecia, y dos dieces de Dinamarca e Islandia. Con lo que los 38 puntos restantes fueron de puntuaciones medias de casi todos los países de Europa, lo que significa que gustó y muchos, quitando a macedonios, alemanes, chipriotas, franceses, eslovenos, checos, suizos y montenegrinos que no le dieron ni un solo puntico.
Bueno la verdad es que independientemente del resultado es un temazo supremo, de lo mejor que ha llevado este país que está en alza aunque siempre ha tenido el título del "null points".
Eurobesos para todos y mañana a llorar dos grandes lágrimas blancas con Italia 1969.
No hay comentarios:
Publicar un comentario