LUXEMBURGO 1972

Buenos días queridos eurolectores,

Me pongo manos a la obra con la canción que ocupa el puesto número 9 en el top. Uno de los grandes clásicos del certamen. Una ganadora de esas que le gusta a casi todo el mundo y hace que coincidan en su valoración muchas personas de diferentes estilos.

Nos encontramos en las decimoséptima edición del festival y Luxemburgo ya tiene dos oros en su medallero, pues había ganado en 1961 y 1965 con Nous les amoreaux y Poupeé de cire, Poupée de son. Pero tras la cuarta posición que alcanzó Vicky Leandros en Viena 67 con L'amour est bleu, llevaba cuatro años de fracasos consecutivos. En 1968 y 1969 fue undécimo con Nous vivrons d'amour y Catherine, siendo en 1970 el farolillo rojo en el duodécimo lugar y marcándose un "null points" con David Alexandre Winter y Je suis tombé du ciel. Y cayendo otro hueco más en 1971, hasta el décimo tercero, con Pomme, pomme, pomme  de Monique Melsen.

Así que la CLT pensó que lo mejor que podían hacer era recurrir a la última persona que les había funcionado en el campeonato melódico. Una joven Vicky Leandros de origen griego, que era hija del músico y compositor Leandros Papathanasiou (Leo Leandros). La nativa de Corfú ya se había hecho un hueco considerable en el panorama musical europeo con su éxito del lustro anterior, y es que no tuvo mucho que envidiarle a Sandie Shaw y sus Marionetas en la cuerda, sobre todo en los países francófonos. 

La griega se afincó en Alemania en 1957, cuando contaba con ocho años de edad, y vive allí desde entonces. Pero tardaría cinco años más en comenzar su carrera artística, cuando en lanzó su primer single en 1962.

Una década después llego al acuerdo de ser la candidata de la televisión luxemburguesa en Edimburgo con el tema Après toi (Después de ti). Una power ballad de la época que con su preciosa musicalidad y una poesía de desamor hecha letra de canción se ganó a los 36 jurados encerrados en el hall de Castillo de la capital escocesa.

En el Usher Hall y actuando en el puesto 17, que ya sabemos que es el de la suerte como os digo siempre, dio una lección magistral vocal y de interpretación que emocionó a los espectadores en sus casas y a la audiencia presente en la sede. Se vistió de negro para no distraer con nada que no fuera el mensaje de su canción. Únicamente lució un sencillo broche en forma de racimo de uvas que le daba un toque de distinción a la parca propuesta estética.

La historia de la canción es la de una chica que se queda destrozada cuando ve que se marcha su amor, y explica lo que sentirá a partir de ese momento y recuerda todas las cosas bonitas que vivió a su lado. Finalmente llega a una conclusión: "Après toi, je ne serais que l'ombre de ton ombre, après toi" ("Después de que marches, solo seré la sombra de tu sombra, después de que marches" - traducción libre).

Con un comienzo de trompetas que sabes que anteceden a una composición sobresaliente, da comienzo un punteo de guitarra que va incorporando la cuerda con unos violines mágicos y una potente percusión a la que se suman los vientos del inicio para hacer un sonido redondo. No sólo en el directo del 25 de marzo de 1972, sino en la versión estudio.

Sumó 128 puntos de 170 posibles. Y tuvo dos plenos de 10 votos de Reino Unido y Yugoslavia. Alemania, Irlanda, Italia y Países Bajos le dieron 9 puntos. Y los dos países que le puntuaron con una cifra inferior a 6 fueron Malta con 4 votos, y los estúpidos jurados de España, el periodista Luis María Ansón y la actriz Emma Cohen (mujer de Fernando Fernán-Gómez desde 1967 hasta el fallecimiento del actor). Aun así le saco 14 puntos al Reino Unido y 21 a Alemania que fueron las que cerraron el Top 3.

Eurobesos para todos. Mañana toca otra ganadora en el octavo puesto del ranking: SUIZA 1988.