SUECIA 2006

Buenos días de sábado sabadete queridos eurolectores,

Llegamos al puesto número 7 de mi Top 100, el que denominan de la buena suerte, y es que he llegado a un punto en el que cualquier canción podría ocupar el #1 de mi ranking histórico, de hecho el tema de hoy estuvo seis años en ese sitio hasta que fue destronado como veremos dentro de unos días...

En primer lugar os contaré mi azarosa relación sentimental con Carola Haggkvist, que tiene el honor de haber sido la única intérprete y ganadora del ESC que ha conseguido hacerse tres Top 5 en tres décadas diferentes. Mi primer Festival de Eurovision con plena conciencia de lo que estaba viendo fue el de 1991 con ocho años, y de aquella experiencia audiovisual obtuve varias conclusiones entre las que destacaba mi exacerbado odio a las artistas que quedaron primera y segunda porque no me gustaban nada, Carola y Amina...

... durante doce años odié a Carola hasta la saciedad porque me parecía repelente, estúpida, con ganas de abofetearla cuando se subía a la mesa para saltar por haber ganado, con sus caras de empanada cuando no sabía quién había ganado en ese caótico y circense festival de sabor italiano... Pero ese año salió a la luz un temazo que había presentado al Melodifestivalen poniendo la letra y la voz de la maqueta pero sin querer concursar, por lo que Björkman le exigió que concursara si quería que sonara en la edición; invitación que rechazó y por ende tema que se guardó en el cajón... hasta que Carola lo cantó en otro programa sueco a la vez que se desarrollaban las galas del MF.

Os presento a continuación una joya musical para que la archivéis en vuestra biblioteca particular.

Una vez que empecé a venerarla y a valorar que había mucha vida más allá del horrible Fangad av en stormvind (Atrapada en una tormenta) me fui reconciliando con ella hasta que en 2005 se predijo que podía concursar en el Melodifestivalen del año venidero, momento desde el cual me volví acérrimo de ella y su mayor defensor a ultranza hasta costarme un sofocón, cómo no me he llevado nunca, el día de la final de Atenas 2006 con la victoria de los malditos monstruos frente a la eterna Diva. Desde entonces la venero más si cabe con sus zarpazos y sus salidas de tono incluidas.

En 2006 se celebró la edición del formato actual del Melodifestivalen con más figuras del panorama musical sueco por metro cuadrado. Unas galas de infarto y nervios, con descalabros y subidones, con las que llegamos a la finalen del 18 de marzo con tres favoritos a la victoria: Andreas Johnson y Sing for me, que abrían la final y quedó tercero con 200 puntos (112 jurado + 88 televoto), BWO y Temple of love que cerraban en décimo lugar y fueron segundos con 202 tantos (92 jurado + 110 del televoto); y una brillante Carola con la versión sueca de Invincible (Invencible) que se titulaba Evighet (Eternidad) obteniendo 234 puntos, con el segundo lugar de los once jurados nacionales que le otorgaron 102 puntos y ganando el televoto con 437.876 llamadas, el 23% de un total de 1.913.152.

Carola cantó de muerte en su semifinal, la última de ellas celebrada en Gotemburgo, en cambio en la final hizo lo posible por superar una afonía derivada de una faringitis aguda, y dio el todo por el todo aunque no pudo igualar lo que había hecho en muchas otras ocasiones, pero los suecos ya sabían de lo que era capaz la niña de sus ojos y la llevaron en volandas a la victoria, de modo que la Diva Haggkvist ganaba su tercer Melodifestivalen, marca que tampoco ha conseguido nadie en Suecia.

Además de sus tres victorias en 1983, 1991 y 2006, concursó en 1990 quedando segunda, y en 2008 a dúo con Andreas Johnson para generar marketing y apoyarle en la victoria, aunque eso generó un voto exagerado en contra de ella, que había ganado dos años antes, y quedaron eliminados en los duelos del andra chansen.

Pero regresando a Eurovision, tras su bronce en Munich 83 luchando codo a codo con Luxemburgo e Israel, y su empatada victoria con la elegante tunecina que representaba a Francia, se presentaba en esta tercera ocasión como una de las favoritas en Atenas. En las casas de apuestas se batía día tras día el liderato con el ruso Dima Bilan y el bosnio Hari Varesanovic. También llegaba a la quincuagésimo primera edición del show que se organizaba ese año en Grecia con el rechazo de gran parte del colectivo eurofan por unas desafortunadas declaraciones sobre la homosexualidad, aunque otra gran mayoría la apoyaba incondicionalmente.

Quien jugó con el status quo de Carola en ese viaje fue la islandesa que hacía un personaje similar al de Chikilicuatre con la pintoresca Silvia Nott y Congratulations (Felicitaciones), hasta el punto de que trascendió la historia no confirmada de que la islandesa entró con cámaras de su programa de televisión en el camerino de la sueca y le cortó con unas tijeras un poco la capa azul de su vestuario... y es que el festival de los monstruos, la payasa y la vieja gloria repetidora dio mucho de sí.

La puesta en escena del Melodifestivalen contaba con una pasarela en el escenario que era utilizada por la natural de Estocolmo para darse un baño de masas y engrandecer la actuación, pero en el circular stage griego no podía hacer eso así que se modificó la puesta en escena adaptándola a nuevo espacio y para ello se utilizó una capa azul enorme que parecía el mar ondeando hasta el final del primer estribillo. Lo que sí se mantuvo igual fueron las banderas que en la final del MF jugaban con el azul y el blanco de la bandera griega pero en mayo eran todas de un beige dorado a juego con el estilismo del equipo.

La Haggkvist también cambió los colores del traje pero mantuvo el corte y la línea que había presentado en la selección sueca. Dejó el azul eléctrico solo para la capa y lo sustituyó por dorado aunque el corpiño era el mismo que lucía debajo de la gasa azul

También se marcó un nuevo bailecito de poco pasos para el puente de la canción que habla del amor eterno, de la lucha por la persona que quieres y el permanecer unidos para siempre. Una canción muy pretenciosa y que sonaba a ganadora, compuesta musicalmente por los populares Thomas G:Son, Bobby Ljungren y Henrik Wikström, y con letra de G.Son y Carola.

El coro estaba conformado por una magnífica y morena Dea Norberg que pegó un ligero resbalón en la final, Caroline Jönsson de rubia. El chico de la izquierda según miramos la foto es Martin Kagemark, el que fue marido de Christer Björkman durante años, y Johan Röhr.

Carola a pesar de olvidarse la letra recibió 214 puntos en la semifinal situándose cuarta tras Finlandia, Bosnia & Herzegovina que fue segunda y Rusia tercera, cambiándose el puesto estas dos últimas en la final. 

En la final Carola perdió 44 votos que la dejaron en 170, empatada a puntos con su gran rival Lena Ph y repitiendo las dos el 5º lugar, pues en la última votación Turquía le dio 3 puntos a Rumanía y Tornero y subieron a 172 tantos, robándole de rebote el puesto que había obtenido en la semifinal. Pero bueno, da igual porque al fin y al cabo permanecía en el top... Lo que sí que me dolió en el alma fue que ningún país le diera los 12 puntos, ya que todos se iban para Lordi, solo tuvo tres 10's de Dinamarca, Noruega y Albania; en cambio en la semifinal si recibió las máximas puntuaciones de Dinamarca, Portugal y Malta.

Bueno, sé que me he extendido demasiado pero tenía mucho que contar de una de las artistas que más polémica e interés genera en el entorno eurofan y de su canción que es de lo mejor y más reconocido de la historia eurovisiva del siglo XXI.

Eurobesos a todos y mañana os espero con otra que fue mi número uno desde el año 99 hasta que llegó Carola y la destronó: FRANCIA 1977.